ENTREGA ESPECIAL

 

Como tantas tardes mi amante telefónico y yo hacíamos el amor a través de las ondas, yo yacía desnuda en la cama, mis pezones erectos excitados indicaban cuan caliente estaba, sus palabras, sus gemidos, nuestra imaginación

 

Todo se desbordaba sin ni tan siquiera tocarme, ya estaba muy húmeda solo por lo que me decía, solo por su voz y aunque mi vibrador estaba preparado apenas lo necesitaba, solo con nuestra imaginación volando, con nuestros deseos y con nuestro tono casi desgarrado entre gemidos mi esencia se desbordaba hasta la sabana manchándola

 

Yo estaba lasciva y agotada, había tenido una mañana muy dura y él era mi recompensa con su llamada me resarcía de todo, me daba todo lo que necesitaba lo que no podíamos darnos  en persona porque nuestras ciudades nos separaban pero la excitación era intensa y acalorada 

 

Me pidió que me acariciara, que pasara las yemas de mis dedos suaves por mi sexo mojado y así lo hice empapando mi mano, en la otra el teléfono me temblaba fruto de la excitación que aumentaba y de mis espasmos previos vaginales

 

Y cuando el momento se acercaba después de casi media hora de caricias sonó el portero automático del portal no podía ser mi pareja, ya que no volvía hasta la noche, ¿Quién sería? entonces lo recordé me traían la compra del día anterior...

 

Me vestí lo mas deprisa que pude, bueno en realidad solo me puse el vestidito rosa corto ligero de andar por casa, pero sin sujetador ni tanga debajo, solo eran dos pisos y el ascensor casi en la puerta de mi casa haría que llegaran rápido no había tiempo de más

 

A todo esto me disculpe con mi amante que casi al borde el orgasmo mutuo, esperaba paciente, dije que no colgara no tardarían mucho en descargar y así lo hizo espero

 

Abrí la puerta aun húmeda y con mis pezones erectos debajo del vestidito el repartidor que me entregaba el pedido era el de hacia unos meses un chico de no mas de 26 años, fuerte en su punto, alto, muy moreno de piel, no muy guapo pero si atractivo y con unos labios tremendos, yo según estaba momentos antes no pude evitar pensar que haría maravillas con ellos en una mujer

 

Pero lo que me impacto fueron sus ojos al pedir permiso para pasar se clavaron en los míos desafiantes y atrevidos, me recorrió con la mirada me sentí desnuda como momentos antes estuve en mi cama

 

Comenzó  a descargar en mi cocina mientras yo le sujetaba la puerta, de vez en cuando su mirada fija me estremecía, cuando de repente me di cuenta de algo fue al colocar un pack de bricks de leche en suelo, se le resbalo cerca de mi quedándose a la altura de mis muslos muy cerca me los miro y después subió la mirada a mi, yo sabia lo que vio porque lo note

Era mi humedad un leve pero intenso hilillo brillante de flujo había bajado por el muslo, sin darme tiempo a limpiarme cuando llegaron, le creí seco en mi excitación anterior con mi amante, pero ahí estaba y ese hombre lo vio

 

Ahora su mirada se tornó más profunda como preguntándose que era eso pero un arqueo de cejas que hizo me indico que sabia lo que era, demasiado denso para ser liquido de otro tipo e instintivamente se relamió

 

Me corte al instante, quedándome clavada en el suelo sin saber que hacer con esa mirada y esa lengua relamiéndose, tan jugosa…pero salvada por la campana, llego su compañero un mocetón fornido, cortado, con unos ojos verdes que embrujaban de lo tiernos que eran y disculpándome dejándoles trabajar me retire hacia el salón y le dije a mi amante por el teléfono, lo que ocurrió a modo de anécdota pero el me dijo

 

-Cielo… ¿Te gustan?..

-Si, no están mal sobretodo el moreno es muy interesante le conozco de otras veces y siempre me come cuando con la mirada viene, pero hoy cielo es como si me deseara poseer…

-Sabes cariño tengo una idea, yo estoy muy caliente y sabes que me gusta jugar mucho si te apetece mi vida, déjate llevar con ese moreno y después me cuentas

- ¿Si, cari quieres que lo haga?…te da morbo ehhh

- Me excita lo sabes, después cuéntame cielo vamos a jugar

 

 

Colgué y me dirigí a la cocina, ya casi habían terminado de descargar todo el pedido, el fortachón rubio se había ido a llevar las cestas al camión y el moreno se quedo allí para que le firmara la nota del conforme pedido, el sudor le caía por la frente, resoplaba del esfuerzo pero su aroma a perfume varonil era agradable

 

Me pidió una servilleta mientras le firmaba, se la di y le ofrecí una bebida fresca, dijo que no podía pero la acepto, demasiado calor…

 

Seguía escrutándome con sus ojos directos, me abrumaban sin querer o queriendo no se, un poco harta de ese descaro le dije

 

-¿Perdona que miras…?

- A ti…lo buena que estas

 

Me quede de piedra ante la respuesta, siempre había sido tan comedido y respetuoso las otras veces, más me encanto su descaro y entre las proposiciones de mi amante, mis pensamientos y el deseo de esos ojos de ese hombre sentí que la humedad crecía y me excitaba de nuevo

 

-Ya… ¿y?-le conteste

-Pues que me acercaría te agarraría por esa melena revuelta, que tienes y te besaría como un loco

-¿Es un reto?- pregunte…

-Es una realidad

 

Me estremecí de solo pensarlo

 

-Pues hazlo

 

Se acerco y me beso yo estaba apoyada en la encimera menos mal, porque creí caerme con su beso, era caliente, jugoso, lascivo al máximo, jugo con su lengua buscando la mía la cual sin poder remediarlo se la ofrecí

 

Ahora su aroma a perfume varonil me inundo y creí enloquecer, sus manos en mi pelo me lo revolvían, cambiaba el ritmo de sus movimientos, me morreaba como un adolescente deseoso con unas hormonas típicas de su edad me estaba calentando más aun

 

 

Solo le detuvo el sonido del portero de nuevo, era su compañero se volvió hacia mí y me dijo

 

-Si quieres me quedo y que haga el ultimo reparto solo y soy todo tuyo, para acabar lo que parece ser que no te acabaron yo lo haré soy capaz

 

Esa bravuconada me gusto, pero había que bajarle los humos, era mi casa y en mi casa mando yo

 

-Mejor dile que suba porque tu solo no podrás -sonreí pícaramente

-Mmmmm…si – contesto

 

Y así lo hizo, ya en ese punto como mi amante quería me deje llevar, porque no jugar al morbo un ratito

 

Dejamos entornada la puerta y cuando subió su compañero alucino, el moreno me comía la boca, abrí los ojos y le indique con el dedo que entrara

Él lo hizo dudoso, su compañero le dijo que pasara y que participara cerró la puerta de la calle y se dejo llevar

En un abrir y cerrar de ojos ahí estábamos los tres desnudos comenzando un juego de caricias

 

El moreno me sentó en la encimera y me abrió las piernas yo sabia lo que buscaba desde que vio lo que caía por mis muslos y yo deseaba esos morros gruesos en mi sexo devorándolo

 

No sé si incitado por el paso que dio su compañero pero el dulce fortachón se acerco y me comió la boca mientras sus manos buscaban mis pezones por encima de mi vestido, pero aun se atrevió a mas bajo mi tirante el cual cayo y el ayudo a bajar del todo sacando un seno del vestido con el pezón muy erecto y comenzó a lamerlo

 

El sentirme succionada en dos sitios a la vez por esos dos jóvenes hombres y con el pensamiento en mi amante creí desfallecer, así que subiendo los brazos me agarre a las asas del los armarios de arriba de la cocina, era tremendo, morboso y caliente

 

El moreno lamía sin cesar sujetándome los muslos, casi rozando la violencia, succionaba mi clítoris jugoso gemía, diciendo que le gustaba penetrándome con su lengua, yo gemía altísimo

 

El rubio me succionaba el seno derecho pellizcando el pezón, la estampa era tremenda yo abierta de piernas jugosa, uno devorándome el clítoris, el otro los senos y yo disfrutando con la imagen de mi amante en mi cabeza, no podía más y llegue al orgasmo entre gemidos altísimos y lametones del moreno pidiéndole que parara o llegaría de nuevo

 

Los dos pararon cuando culmine mi clímax, les dije que se bajaran los pantalones, cuando esos pantalones y los bóxer de ambos dejaron al aire su sexos, se los agarre con ambas manos una a cada uno y mientras seguía acariciado uno mis senos y el otro comiéndome de nuevo la boca los masajee, al unísono mis manos subían y bajaban

 

Salive ambas para que el recorrido fuera mas suave en sus penes, ellos gemían erectos dispuestos para mi, sus falos colorados y tersos por la concentración de ardor eran míos, mis movimientos una vez cogido el ritmo y al unísono fueron de lentos a intensos

 

Sus caras describían, su placer y sus bocas soltando de vez en cuando un “joder… ”, me decían mucho mas que si me hablaran

 

Y así, no pudiendo aguantar mas se derramaron en mis manos a la vez, empapándome las mismas y los dedos con su esencia

 

Cuando ya se fueron después de vestirse y besarme ambos les dije que jamás ocurrió y que ya nunca ocurriría más asintieron y se fueron

 

Yo sabía que así seria porque jamás volveré a comprar en ese supermercado más

 

Cuando me asee volví  a la cama, me desnude y llame a mi amante telefónico, le conté lo ocurrido el escuchar de mi propia boca el relato de lo ocurrido y notar por la voz de mi amor su  gran excitación y sus gemidos próximos al orgasmo, hizo que de nuevo y con una facilidad pasmosa, deseara penetrarme con mi vibrador, imaginando el falo de mi amante y llegue al orgasmo de nuevo una vez saciados, reímos ante la situación y solo me dijo…

 

-Cariño eso si que es una entrega especial

 

 

Ayelen